sábado, 18 de mayo de 2013

UN BUEN LOCUTOR


RESUMEN: Un buen locutor es reconocido no sólo por su voz sino también y fundamentalmente por su actitud frente al micrófono y por cómo proyecta sus dotes radiofónicos hacia el público oyente. Esto significa que se hace necesario el uso del género dramático para que el locutor además de esto, se convierta en un dramaturgo que sabe usar su voz como carta de presentación y, actúa con absoluta naturalidad creando así un lazo muy fuerte entre él y sus oyentes.
PALABRAS CLAVES: Radio, voz, género dramático, feedback.

Hablar es comunicar y, comunicar es expresar. Expresar es dejar salir, liberar, soltar, espirar, exhalar, emanar, etc. Se pone de manifiesto cómo nuestro cuerpo reacciona psíquico, emocional y muscularmente como un todo ante determinados estímulos; de esta manera, la voz se transforma en la proyección externa de nuestra personalidad.
En radio no sólo es necesario tener una gran voz y conocer técnicas para mejorarla sino también es necesario tener actitud, saber llegar al público y ser carismático. En nuestra condición de radioyentes capturamos lo que el locutor nos muestra a través de su voz.
Es por eso que se debe considerar que ser un buen locutor no significa solamente contar con una voz prodigiosa, sino aunar a ello una serie de factores de la personalidad que deban irradiarse hacia el público. El locutor es la carta de presentación del medio de comunicación radial, por lo tanto el oyente necesita de un locutor (a) que le aporte confianza. Esta es una profesión donde el ritmo, la entonación y el matiz desempeñan un rol básico y todo ello sobre la cuerda de lo natural. Algunos de dichos factores son:
La naturalidad consiste en expresarse sin mayor esfuerzo ni afectación. Las palabras fluyen sin titubeos ni rebuscamientos y llegan dócilmente a la imaginación del oyente.
La claridad es expresar las ideas de manera comprensible, que el mensaje sea captado por nuestros oyentes eficazmente,  y que subjetivamente pueda ver lo que piensa el locutor.
La precisión como sinónimo de laconismo y concisión. Consiste en expresarse de manera concreta evitando la repetición y los rodeos, así como dejar de tratar asuntos que sean ajenos al tema que nos preocupa.
La cultura que va aunando a la educación y experiencia del locutor. Como comunicador social, es necesario contar con conocimientos sobre la realidad del ambiente, la sociedad de la que forma parte así como por ejemplo conocimientos teóricos sobre los temas que le corresponde tratar y otras materias afines.
La responsabilidad, se trata de responder fehacientemente por las tareas que se deben de cumplir y esta responsabilidad se expresa principalmente en la fe que se tiene por las ideas que se deben propagar en los marcos del servicio a la verdad, la justicia y la libertad que son los principales principios éticos del periodista. Al igual que estos valores que son el fundamento de la actividad periodística, el buen locutor debe asumir como su responsabilidad la defensa de todos los valores que hacen posible nuestra vida en sociedad.
El talento que no es más que la habilidad y el don que se tiene para lograr una comunicación eficaz y provechosa, mejor aún si con ello se logra el aprecio y la admiración de la audiencia. El talento se manifiesta principalmente en la sinceridad, el ingenio, la presteza y el entusiasmo con que se aborda la comunicación oral.
El estilo, esta cualidad que consiste en saber distinguirse de los demás por el sello personal que se impregna a sus expresiones, por la manera de decirlas. Para ello debe tenerse en cuenta que se está comunicando con personas que deben saber identificarlo, que deben considerarlo un visitante bienvenido y no un molesto intruso.
Todos estos factores están sujetos a cada persona y su estilo de vida, pues se sabe que la voz es el soporte acústico de la palabra; ella vehiculiza nuestros pensamientos, ideas, emociones, etc. Emerge, se proyecta, se modifica en nosotros mismos y a través de todo nuestro ser.
Todo nuestro cuerpo participa en su producción, pero, al mismo tiempo, todo nuestro cuerpo reacciona al escuchar nuestra propia voz, el entorno sonoro o el mensaje oral de nuestros semejantes. Así se produce un feedback de comunicación y emoción único que en el ser humano alcanza los picos más altos de expresión.
Inés Bustos Sánchez especifica en su libro “La voz, la técnica y expresión” (1) que el perfil profesional de la primera generación de voces microfónicas (1924-1936) fundamentan estilos profesionales sucesivos resultando un híbrido entre rapsodas, actores y periodistas, aquellos que fueron formados en la tradición del gesto exagerado de la declamación en un escenario, en el énfasis rítmico de la dicción de un texto poético y conscientes de la trascendencia comunicativa que subyace en el acto periodístico de informar “al instante”, a través del micrófono, a un público de dimensiones extraordinarias, nunca imaginadas hasta entonces.
Así muchos actores fracasaron, porque su estilo de declamación tan impostado era impropio de la verdad radiofónica o por la ausencia del feedback de las miradas y emociones del público, que el actor necesitaba a modo de válvula retroalimentadora de la energía necesaria para la construcción del personaje.
Las paulatinas definiciones y redefiniciones de los primeros géneros radiofónicos, a modo de códigos narrativos del lenguaje radiofónico, contribuyeron a diversificar poco a poco la primera dimensión omnisciente del “locutor radiofónico”. El primer locutor de Radio Barcelona en su etapa fundacional (1824- 1926), Rafael del Caño, era apreciado porque sabía expresar con igual arte la información de un suceso, la lectura de una poesía, la conferencia divulgativa sobre un asunto científico o la transmisión amena de un anuncio publicitario. En la medida en que fueron acotándose los límites expresivos y narrativos de los programas radiofónicos, encuadrados en géneros o formatos distintos, así también fueron encontrando su acomodo en la radio voces distintas para cometidos distintos, con unas cualidades propias para cada ocasión comunicativa.
Es por eso que desde hace muchos años, además de ser periodistas era necesario tener actitudes teatrales tanto corporales como en la voz. Así, el género dramático ha marcado grandes rasgos en la emisión del trabajo periodístico, colaborando con la verdadera aceptación en la audiencia y la efectividad en la retroalimentación.
La acción se ve determinada por el diálogo, y a través de él, se establece el conflicto central que otorga sentido al trabajo final.
Las características de los elementos de este género (2) como la acción, los personajes, la tensión dramática, el tiempo y el diálogo, y junto a estos, el uso de esquemas argumentales funcionales, podrían generar óptimos resultados en el público.
A manera de conclusión, en la radio no se necesitan voces extraordinarias sino por el contrario, es necesario saber llegar al público con carisma, conocimiento técnico y con mayor importancia: saber un poco de todo (3). Por otro lado, queda claro que la emisión de información en el trabajo periodístico no es más que meramente la proyección de la voz a través de un micrófono, sino la caracterización de un personaje que trabaja con la información haciendo uso del género dramático en su voz, con la finalidad de encandilar a la audiencia y garantizar su fidelidad y retroalimentación.

(1) 
(2) 
(3)

Credibilidad en la radio.Diferentes factores


RESUMEN: La radio como medio de comunicación engloba su complejidad respecto a los diferentes factores que se incluyen en el desarrollo radiofónico, es decir, que para lograr ser un buen locutor, los comunicadores debemos tener en cuenta que la credibilidad se gana a través del tiempo y del uso inteligente de técnicas que se pueden usar en el mensaje para proyectarlo a una audiencia diversificada.
PALABRAS CLAVE: Audiencia heterogénea, credibilidad, tonalidad, persuasión.

En radio, el término audiencia ha ido evolucionando con el transcurrir de los años y con la aparición de distintos estudiosos, su concepto ha ido abarcando  diferentes enfoques respecto a los medios de comunicación. La audiencia, entonces, actualmente puede ser definida como el conjunto de individuos que forman parte de un colectivo que se encuentra  expuesto a estímulos determinados que son emitidos por algún canal en específico dentro de un contexto y tiempo específico.
La audiencia se caracteriza por ser heterogénea, pues el conjunto de personas que lo integran reúnen diferentes aspectos, sociales, culturales,  políticos, económicos, religiosos, etc.
Existen también la audiencia potencial que la constituiría el grupo de personas que por hallarse en un lugar determinado o por disponer de  los medios técnicos y económicos necesarios es susceptible de recibir un mensaje mediante un canal (ejemplo: la radio); y la audiencia real o efectiva es aquella que está compuesta por un número total de personas que reciben un mensaje a través de uno o varios medios considerándola también como audiencia bruta.
A través de los años, en cuanto a audiencia se refiere,  ha existido una breve evolución y contextualización histórica de una masa homogénea a una, conocida actualmente, audiencia heterogénea.  
La masa homogénea tuvo sus inicios  durante la época dorada de la radio y se consideró como tal por su uniformidad y por la inexistencia de alternativas en cuanto a variedades de programación. Debido a la aparición de las nuevas tecnologías y a la inclusión de contenidos  especializados, innovadores y atractivos para el público, traerían consigo la existencia de nichos de audiencia diferenciados y clasificados de distintas maneras, denominándose así audiencia heterogénea.
Es decir que el mensaje emitido en radio pasa de ser un mensaje general  dirigido a una masa total a un mensaje personalizado y especializado (multiplicación de alternativas) según lo que el oyente decida (clase de mensajes, tiempo y lugar). El posicionamiento social de las nuevas  tecnologías y la aceptación de estas por parte del público hicieron que se rediseñara el concepto y las características de la audiencia.
Junto a esta transformación hay que tomar en cuenta que los mensajes que se emiten en una radio se basan en la voz del locutor y el efecto que cause en determinadas audiencias podrían garantizar o no su credibilidad frente al público.
Así el mensaje radiofónico que es caracterizado por su claridad para hacer asequible la expresión del mismo, por ser concreto y activo, y por su brevedad respetando las exigencias del tiempo; intenta lograr la máxima efectividad y significación en el menor tiempo posible, ofreciendo, además, todas las técnicas persuasivas que son necesarias de atracción del oyente a un ritmo demasiado acelerado para el conocimiento consciente.
Así mismo, es evidente que no todas las personas  tienen las mismas características físicas ( no existen dos personas en el mundo con un mismo timbre de voz) ni la misma predisposición para la comunicación; sin embargo, es conveniente saber que existen distintas técnicas y reglas que se deben seguir para potenciar el éxito y efectividad del mensaje.
De este modo, cualquier tipo de voz podría llegar a ser creíble teniendo en cuenta que pueda utilizar y dominar sus conocimientos y técnicas expresivas, además, cabe mencionarse, de una actitud adecuada al contenido y contexto de su discurso.
De alguna manera, juzgamos a los individuos no sólo por su imagen sino también por su voz pues las cualidades de nuestra voz también condicionan nuestras relaciones sociales. Y cuando se habla de cualidades vocales acústicas nos referimos al  timbre o tono, la intensidad y la duración.
De todas ellas, una es esencial a la hora de distinguir, no sólo comúnmente las voces, sino también para diferenciar entre voces masculinas y femeninas (1), y se trata del tono.
Esta variación del tono que hace distinguir las voces de cada uno se mide en ciclos por segundo, en el hombre el tono en la escala se encuentra entre los 80 y 250 ciclos por segundo y en las mujeres entre 150 y 350 c/s; mientras que en los niños están entre 250 y 500 c/s. esto define a los tonos graves o agudos, pues cuanto más alto es el tono más agudo es el sonido (como sopranos).
La voz aguda es rápida, intensa y apelativa mientras que la voz grave es lenta, profunda, intimidante, connota presencia y menor distancia y es persuasiva.
De acuerdo a la tonalidad de la voz es que el público oyente le otorga cierto grado de credibilidad al mensaje emitido en la radio. Pero ¿qué significa credibilidad en radio?.
Credibilidad es un concepto que las personas utilizan para decidir si creen o no en una información de la que no son testigos directos y en su aplicación intervienen componentes objetivos y subjetivos que se conceden a las fuentes, canales o plataformas de difusión de información como los medios de comunicación. Tradicionalmente, la credibilidad se compone de dos dimensiones principales: confianza y grado de conocimiento donde ambas poseen componentes objetivos y subjetivos. Es decir, la capacidad de generar confianza es un juicio de valor que emite el receptor basado en factores subjetivos como las afinidades éticas, ideológicas o estéticas. La credibilidad va de la mano de la verdad, de manera que una persona o fuente poseerá  un mayor grado de credibilidad si no se ha visto involucrada en episodios  en los que se haya puesto en evidencia o se sospeche que ha mentido. A medida que se producen sospechas respecto a su honestidad va disminuyendo paulatinamente. Además de las dudas sobre la honestidad, la credibilidad también se puede perder por una acumulación de errores en la difusión de información o de incongruencias en la difusión de opiniones o interpretaciones.
Entonces en radio, la credibilidad se mide no sólo por la imagen ganada o prestigio de la empresa radiodifusora, sino también por el dominio de los distintos elementos técnicos y la actitud del que dirige un mensaje y es un factor fundamental que todo comunicador debe tener en cuenta; no sólo la actitud como factor interno respecto a su personalidad, sino también como factor externo refiriéndonos a la postura y la distancia ante el micrófono. En producción y emisión radiofónica esto es fundamental pues un locutor espera generar un buen ambiente para la creación del feedback con su público oyente.
Es necesario entonces, el uso de técnicas para educar la voz de un locutor de radio, debe dominar herramientas de trabajo como la dicción, la entonación o el ritmo.
La dicción se refiere a  producir de manera correcta los sonidos de todos los fonemas, sílabas, palabras y frases del discurso que se dirige; es la producción clara y precisa de una vocalización para permitir la decodificación de todos los sonidos integrados en el discurso.
La entonación se define como el énfasis que se le otorga a algunas palabras y se le quita a otras para marcar la diferencia en cuanto a sintaxis del mensaje, siendo así más comprensible, asimilable y por ende, más creíble. La entonación responde a la combinación de elementos que forman una estructura que descansa sobre todo en la duración, ya que está ligado a la sucesión en el tiempo de los impulsos sonoros verbales. Hay que tener en cuenta que a esto se le agregan la velocidad en la lectura y las pausas teniendo en consecuencia la duración de cada una de ellas.
En cuanto a la velocidad de lectura, pues se sabe que la radio no tiene el apoyo de los códigos visuales para la mejor comprensión del mensaje, así que el contenido se comprende a través de lo expresado mediante la voz y está sujeto al tiempo. El oyente no puede volver atrás para revisar el contenido del mensaje y por todo lo anterior el mensaje debe dejarse claro y explícito pues a mayor rapidez, menor compresión lo que por ende exige mayor atención por parte de los oyentes. A mayor velocidad, menor articulación y esto perjudicaría la pronunciación.
La mayoría de autores recomienda entre 160 a 180 palabras por minuto y en publicidad se sugieren 150 ppm.
En cuanto a las pausas se consideran también importantes porque le otorgan sentido al discurso, porque lo segmentan en función del contenido, organizando las distintas partes del mensaje. Éstas  muchas veces se emplean con la intención de crear suspenso o inquietud e incluso para dar relevancia al elemento que les sucede, proporcionan un momento de reflexión al oyente acerca del mensaje y no necesariamente corresponden con los signos de puntuación, pues estos han sido comúnmente colocados para un texto escrito y no para uno oral.
Otro factor importante para la emisión del mensaje en radio es la actitud con la que se presenta el locutor o locutora, pues cuando uno está ante el texto que se va a emitir, influye positiva o negativamente en su credibilidad. Además todo buen locutor reconoce a través de su experiencia radial distintas normas o especificaciones cuando se está frene al micrófono (2).
Un locutor debe saber dominar sus emociones pues a través del micrófono se proyecta su personalidad y su capacidad de autocontrol.
A nosotros, los radioescuchas, ¿nunca nos ha pasado que mientras el locutor habla, vamos imaginando su apariencia física? O mientras narra una noticia, ¿también la imaginamos?, la respuesta, creo yo en su mayoría es sí.
Pues claro, la radio tiene una inmensa capacidad y es, incluso, el único medio que puede estimular la creación de imágenes mentales en el oyente debido a que es un medio específica y únicamente sonoro, por ende facilita y motiva esta capacidad.
El lenguaje sonoro intenta crear imágenes y propone que un mensaje se adhiera a la audiencia pasando por la susceptibilidad de los sentidos y dejando huella por el acervo  de la memoria.  Debido a la propia naturaleza de sus bases, el lenguaje sonoro influye tremendamente en la audiencia por la emoción y el placer. Esto es posible gracias a que sus mensajes se perciben  a través de la vibración de ondas, y las ondas no sólo se escuchan sino que también se sienten (3).
El oído es global, aprecia la totalidad del entorno; el ojo se cierra, se anula y se niega la posibilidad de captar lo que nos rodea, sin embargo, el oído no puede dejar de oír, es independiente de la voluntad de la persona receptora pues oye siempre.
Nosotros escuchamos de diferentes formas: oímos, como acto involuntario pues es imposible no oír, escuchamos cuando prestamos atención al mensaje (acto voluntario), escuchamos pasivamente cuando percibimos los mensajes sin prestarles atención y además existe una atención pasiva ya que es posible leer, escribir, conducir y  trabajar sin tener que atender el contenido sonoro, y por último, somos capaces de escuchar activamente cuando mantenemos la atención de manera consciente y voluntaria.
Los efectos sonoros  son la representación del contexto  y su función descriptiva o imitativa ayuda a la audiencia a definir el paisaje permitiendo visualizarlo a través de los sonidos que lo denotan. Son un conjunto de formas sonoras representadas por sonidos inarticulados o de estructura musical, que provienen de fuentes naturales y/o artificiales y que además sustituyen objetiva y subjetivamente la realidad para construir una imagen del espacio o circunstancia en la que se está desarrollando la principal acción (4). Los efectos sonoros tienen diferentes funciones como:
Función Ambiental: Llamada también descriptiva o denotativa porque localiza la acción en un espacio visual y otorga credibilidad y verosimilitud en el mensaje.
Función Expresiva: Llamada también connotativa porque el efecto sonoro también transmite un estado de ánimo y por ende un movimiento afectivo funcionando como una metáfora donde la analogía entre la fuente sonora y la idea que representa viene siendo determinada por convenciones culturales, mitos o simples semejanzas rítmicas.
Función Narrativa: Llamada también dramática porque la continuidad narrativa de la realidad se articula por la yuxtaposición o superposición de distintos segmentos sonoros de una misma realidad temática o espacio-temporal o de distintas secuencias sonoras.
Función Ornamental: Llamada también de acceso temático porque se utiliza como subsidiario y elemento accesorio de la palabra y no para otorgar la verosimilitud al relato hablado.
Los planos sonoros son entendidos como la distancia de los locutores respecto al micrófono y tienen como principal objetivo localizar acciones y personajes desde un punto de vista espacial,  a través de la modificación de las distancias puesto que únicamente a través de ellas le es posible tener unas idea de la realidad y al igual que los efectos sonoros cumplen un lugar importante en la atención del mensaje por parte de los oyentes.
Así en pocas palabras, la radio como medio de comunicación incluye diferentes aspectos que engloban su complejidad en el desarrollo periodístico, desde la actitud del locutor, el uso de técnicas para su óptimo desempeño radial, la credibilidad que se requiere para garantizar un feedback positivo y la fidelidad del oyente, la persuasión (5) que se emite subliminalmente en el mensaje radiofónico, la variedad de la audiencia que recibe dicho mensaje y los diferentes recursos sonoros que lo incluyen.








PROYECTO DE PRODUCCIÓN “COMUNICÁNDONOS”


1.      Nombre: “Comunicándonos”
Capítulo 1: Grandes comparaciones.
Capítulo 2: Una magnífica idea.
Capítulo 3: Todos, ¡manos a la obra!.
Capítulo 4: Emprendiendo un sueño.
Capítulo 5: Sí se puede.

2.      Duración:
La duración por cada capítulo es de 5 minutos aproximadamente, por lo que el tiempo total de la serie es de 25 minutos.

3.      Periodicidad
La transmisión de la serie será de 2 vez por semana: los sábados y domingos.
La elección del horario de transmisión de la serie se tomó en cuenta debido a la disposición de tiempo de las familias en general para garantizar mayor audiencia y atención del mensaje.
El horario asignado para la transmisión del producto será en el caso de los sábados y domingos, de 3 a 4 de la tarde.

4.      Audiencia objetivo:
Nuestra audiencia objetivo serán los jóvenes de Cañaris, pues el tema abordado es oportunidad de desarrollo en la comunidad mediante el uso del trabajo radiofónico.


5.      Objetivos:
-Promover capacidades de comunicación entre los pobladores basándose en la concientización de sus capacidades.
-Contribuir al desarrollo de la comunidad abarcando diferentes aspectos potenciales del lugar.
-Crear oportunidades para los habitantes.


6.      Naturaleza

6.1.Sinopsis

Serie 1: Grandes comparaciones
Casimiro, está solo en su casa pensando y comparando su experiencia vivida en Lima, ya que es uno de los muy pocos que tuvieron la oportunidad de salir de Cañaris, con la situación actual de su pueblo, se siente indignado por la falta de preocupación e ignorancia de su gente y a la vez se motiva para empezar a hacer algo por su pueblo natal.

Serie 2: Una magnífica idea.
Casimiro sale de su casa en busca de sus amigos de infancia, Celio y Domingo, ellos lo reciben muy emocionados y él les cuenta su experiencia por Lima, además de su tristeza por ver a su pueblo olvidado. A Casimiro se le ocurre la idea de hacer una radio comunitaria para favorecer a los pobladores y descubrir nuevas capacidades en ellos. Celio y Domingo escuchan con atención, sienten temor pero apoyan a su gran amigo.

Serie 3: Todos, ¡manos a la obra!.
Casimiro, Celio y Domingo recorren todo el pueblo en busca de sus demás amigos de la infancia, a algunos los encuentran en sus chacras, otros en sus corrales. Los tres amigos cuentan con entusiasmo que habrá una reunión para dialogar sobre esta propuesta. A esto sólo responden dos amigos más interesados en el tema, María y Juan. Casimiro propone instalar una radio comunitaria en el pueblo, María se ofrece voluntariamente a trabajar con madres de familia para  impulsar sus conocimientos en la ganadería, Celio y Juan trabajan con los jóvenes de su edad y, Casimiro y Domingo trabajarán con los varones para abordar temas de minería y agricultura.


Serie 4: Emprendiendo un sueño.
Casimiro pide el apoyo de sus compañeros limeños, Melissa y Gustavo, por vía telefónica les cuenta la situación y ellos aceptan de inmediato. Ambos llegan al lugar después de dos días con todos los implementos necesarios para la instalación de parlantes y una carpa central. Mientras tanto los demás chicos continúan comunicando a los vecinos acerca de su labor y piden el apoyo correspondiente. La mayoría siente temor y otros son grotescos.

Serie 5: Sí se puede.
Ya han pasado dos años después de poner en marcha este gran proyecto y Casimiro está en su chacra recordando su niñez junto a sus amigos que ahora son más que eso, cómplices de su sueño. Su pueblo ahora es más independiente y seguro de sí mismo, la radio comunitaria fue llamada “Sí se puede”. Casimiro relata sus experiencias en ese tiempo y la transformación de su gente, lo difícil que fue comenzar con el proyecto y los grandes resultados obtenidos.

6.2.Estructura

Frase reflexiva:                      20 segundos
Iniciación del tema:                  1 minuto
Desarrollo de la trama:             2 minutos y 20 segundos
Culminación:                            1 minuto, 30 segundos
Cola musical:                         20 segundos


7.      Recursos

7.1.Recursos humanos

7.1.1.      Equipo de producción:

Productor
Director
Guionista
Director artístico
Editor


7.1.2.      Equipo artístico:

 CASIMIRO: personaje principal
ü  Joven cañariaco que regresa de Lima a su pueblo.
ü  Tiene 25 años de edad.
ü  Es empático, solidario, alegre y motivador.
ü  Voz que inspira confianza, moderada y motivadora.

CELIO:
ü  Amigo de la infancia de Casimiro, trabajador de campo.
ü  Tiene aproximadamente 24 años
ü  Muy extrovertido y vivaracho.
ü  Voz fuerte y ritmo acelerado.

DOMINGO:
ü  Amigo de la infancia de Casimiro, trabajador en la mina.
ü  De unos 27 años de edad.
ü  Observador, analítico y seguro.
ü  Voz ronca, con ritmo mesurado y conciso al hablar.

JUAN:
ü  Amigo de la infancia de Casimiro, habla quechua también.
ü  Tiene 25 años de edad.
ü  Tímido e inteligente.
ü  Habla con tono bajo demostrando su timidez.
MARÍA:
ü  Amiga de la infancia de Casimiro, con problemas en su hogar
ü  Tiene 26 años de edad.
ü   Preocupada, desanimada pero tolerante.
ü   Voz que inspira confianza.

MELISSA:
ü  Amiga de Casimiro y ex compañera de clase en Lima.
ü  Tiene 25 años de edad.
ü   Pícara, extrovertida y colaboradora.
ü   Voz con tomo moderado y dejo limeño muy marcado.
GUSTAVO:
ü  Amigo de Casimiro y ex compañero de clase en Lima.
ü  Tiene 26 años de edad.
ü   Inteligente, colaborador, inteligente y estratégico.

7.2.Recursos logísticos:

-Micrófonos
-Grabadoras
-Audífonos
-Computadora

7.3.Recursos económicos:

Actividad


Costo en soles
Viáticos(pasajes)
80
Edición
10
Ejecución del programa
50
Materiales
20
TOTAL
160



8.      Financiamiento
En este caso por tratarse de proyecto de carácter estudiantil, el costo total será asumido por los miembros del equipo de producción.


PROYECTO DE PRODUCCIÓN “NOSOTROS TAMBIÉN PODEMOS”


1.      Nombre: “Nosotros también podemos”
Capítulo 1: Conversando con papá.
Capítulo 2: Los niños también podemos.
Capítulo 3: La noticia esperada.
Capítulo 4: El primer día.
Capítulo 5: La realidad.

2.      Duración:
La duración por cada capítulo es de 5 minutos aproximadamente, por lo que el tiempo total de la serie es de 25 minutos.

3.      Periodicidad
La transmisión de la serie será de 1 vez por semana: los sábados.
La elección del horario de transmisión de la serie se tomó en cuenta debido a la disposición de tiempo de los adolescentes escolares y de la familia en general para garantizar mayor audiencia y atención del mensaje.
El horario asignado para la transmisión del producto será en el caso de los sábados, a las 11 de la mañana.

4.      Audiencia objetivo:
Nuestra audiencia objetivo será preferentemente los adolescentes del distrito de Pomalca, ya que el tema es sobre desarrollo de capacidades comunicativas y son ellos quienes serán motivados para que su voz sea escuchada en el lugar donde viven.

5.      Objetivos:
-Promover capacidades comunicativas en el distrito de Incahuasi.
-Contribuir al desarrollo comunitario mediante la inclusión en la educación.


6.      Naturaleza

6.1.Sinopsis

Serie 1: Conversando con papá
Jacinto despierta muy temprano y se alista para ir a su chacra junto a su papá, en el camino y durante su faena, el niño le hace una serie de preguntas que poco a poco hará que éste piense seriamente en la posibilidad de que su hijo estudie en lugar de trabajar.

Serie 2: Nosotros también podemos
El señor Aurelio, papá de Jacinto, conversa con su vecina Flora, quien conoce al director del programa “Nosotros también podemos”, Adolfo; él le explica la labor de ese programa, la inclusión de niños en la educación y finalmente es convencido para que el pequeño Jacinto sea matriculado en el colegio que tanto añora.

Serie 3: La noticia esperada.
Aurelio regresa a su casa y le comunica la gran noticia a su hijo, quien se pone muy feliz y está muy ansioso por empezar a estudiar y conocer nuevos amigos e imagina su primer día en el colegio.

Serie 4: El primer día.
Jacinto se despierta muy temprano y emocionado se alista para ir a su escuela, al llegar, la profesora Janet lo presenta frente a sus compañeros quienes lo miran raro por ser proveniente del campo. Jacinto conoce a Lili, una niña de su edad que se acerca a él para ser su amiga y lo defiende de las burlas de sus compañeros de clase.

Serie 5: La realidad.
Lili va en busca de la profesora Janet y le comenta sobre las burlas que recibe Jacinto por parte de sus compañeros de clase. Janet llama inmediatamente a Adolfo, el encargado del programa por el que fue contactado Jacinto, quien asiste de inmediato a la escuela y habla con todos los alumnos del salón, cuenta la vida que llevaba Jacinto en el campo y explica la finalidad del programa que dirige. Al finalizar, todos entienden el mensaje y aceptan a Jacinto tal y como es.

6.2.Estructura
Frase reflexiva:                      20 segundos
Iniciación del tema:               1 minuto
Desarrollo de la trama:         2 minutos y 20 segundos
Culminación:                          1 minuto, 30 segundos
Cola musical:                         20 segundos


7.      Recursos

7.1.Recursos humanos

7.1.1.      Equipo de producción:

Productor
Director
Guionista
Director artístico
Editor

7.1.2.      Equipo artístico:

 JACINTO: personaje principal
ü  Niño que vive en el campo con sus padres.
ü  Tiene 11 años de edad.
ü  Es trabajador, responsable.
ü  Voz moderada y dulce.

AURELIO:
ü  Padre de Jacinto, trabajador de campo.
ü  Tiene aproximadamente 40 años
ü  Algo machista, trabajador e inseguro.
ü  Voz fuerte y muestra seguridad.

FLORA:
ü  Vecina de Aurelio.
ü  De unos 38 años de edad.
ü  Luchadora, trabajadora y cooperadora.
ü  Habla rápido y demuestra seguridad.

ADOLFO:
ü  Dirigente del programa “Nosotros también podemos”, vive  fuera de Incahuasi.
ü  Tiene 35 años de edad.
ü  Sereno, líder, paciente y motivador.
ü  Habla coloquialmente, es dinámico al dirigirse a los niños.
JANET:
ü  Profesora del colegio donde asiste Jacinto y amiga de Adolfo.
ü  Tiene 33 años de edad.
ü   Inteligente, preocupada, empática y altruista.
ü   Voz que inspira confianza, serena.

LILI:
ü  Amiga de Jacinto y compañera de clase.
ü  Tiene 11 años de edad.
ü   Inteligente, audaz, defensora de Jacinto.
ü   Voz aguda e infantil.

7.2.Recursos logísticos:

ü  Micrófonos
ü  Grabadoras
ü  Audífonos
ü  Computadora

7.3.Recursos económicos:

Actividad


Costo en soles
Viáticos(pasajes)
60
Edición
10
Ejecución del programa
30
Materiales
30
TOTAL
100



8.      Financiamiento
En este caso por tratarse de proyecto de carácter estudiantil, el costo total será asumido por los miembros del equipo de producción.